miércoles, 31 de octubre de 2012

... IMÁGENES SUELTAS ... fasciculo IV






 
     Condujo su coche sin rumbo definido. Su pensamiento estaba vacío, no se concentraba en nada. Ni se dió cuenta que el coche había parado. 
      Solo se despertó cuando se dió cuenta de una luz azul detrás suya. El coche de la brigada de tráfico se acercaba.     Entonces tuvo la percepción de que estaba parado en medio de la carretera. 
        Puso el motor en marcha y paró en el arcén. El coche de la policía también paró. Un agente salió y se acercó a su ventana.




 


      --- Se siente bien?
      Miró al policía con los ojos brillantes.
      --- La verdad es que no muy bien … no muy bien …
     Los agentes le pedieron la documentación, suya y del coche … miraron todo el vehículo … le pedieron que hiciese el test de alcoholemia. Negativo … por supuesto … si no había cenado … cmenor aún bebido …
      Pero la verdad es que no se sentía muy bien.
    Pasada cerca de media hora los agentes lo dejaron seguir con el compromiso de que iría para casa.
    Y eso hizo.


 

 
      Se acostó sin se quitar la ropa y se dormió de golpe.
    La noche ha sido poblada de sueños raros no muy bien definidos. Por la mañana la cabeza le pesaba y el cuerpo le dolía. Se sentía como si estuviese resfriado y fue a visitar a su medico de cabecera.
    Este lo miró con curiosidad. Le recetó un analgésico y un antibiótico, pero sin mucha convicción. Intentó saber lo que pasaba.
     Después de dudar un poco aceptó a contarle lo que pasaba … sin grandes detalles … 




 


     Pasó por una farmacia y después para casa … volvió a su cama … esta vez … se puso un pijama.
     No podía dormir. En su cabeza habían imágenes sueltas … una más nítidas … otras un poco difusas. El cansancio acabó por vencerlo.
      Se despertó con el insistente sonido del timbre del teléfono fijo. Era Sonia. Miró el reloj. Siete de la tarde. 
     Había dormido cerca de siete hora sin interrupción. Se sentía mucho mejor. 
     Ella lo invitaba a salir, por la noche, después de cenar. Aún se sentía flojo … declinó la invitación.




 


      Más tarde, cerca de las nueve sonó el timbre de su puerta.    Pensó que era Sonia. 
    Abrió aún de pijama … pero eran dos hombres que no conocía.
    Se presentaran con unas tarjetas en que ponía algo del gobierno. Se sorpriendó tanto que ni se pudo fijar a que entidad gobernamental pertenecian.
       --- Podemos hablar con usted?
     Les franqueó la entrada. Les pidió un poco de tiempo para cambiar de ropa. Ellos lo esperaron en el salón.
    Sabían de su historia. No le explicaron cómo se habían enterado. 
     Cuando empezaron a hacer preguntas él se dió cuenta que que sabían muy poco. Solo podría ser el médico el que les pasó la información ya que había sido mucho más minucioso con Sonia.
     Volvió a contar todo desde el inicio. Los vió muy interesados con la promesa de verse de nuevo contacto dentro de dos semanas. 
      Uno de ellos sacó un calendario del bolsillo y confirmó que la fecha seria 8 de Enero. En su cabeza sintió que habia empezado una cuenta atrás.
      La noche de ese día fue aún mas larga.




 

      Permaneció en su cama, luz apagada … sin encender la tele.
     En su mente había mucha luz … las imágenes empezaban a aclararse … a definirse … 
     En algunas aparecían los seres que habían hablado con el … otras eran pasos históricos … tiempos pasados … en una de las escenas más concretas se veía un niño hablando con ellos … se notaba que el niño presentaba algún retraso en su desarrollo … después parecía que las imágenes iban avanzando en el tiempo.    
    Cada vez el niño parecía más mayor. En la edad adulta lo reconoció. Era Einstein. 
    Revolvía folios llenos de cálculos y estaba eufórico … había llegado a una conclusión que iría revolucionar el mundo. De todo era lo más nítido que recordaba.


 
 
      En otras imágenes sueltas veía la superficie de otro planeta … por fotos que había visto en Nacional Geografic reconoció Marte … las imágenes mostraban también uno de sus dos satélites … se acercaban … más … más … penetró en su interior y, de repente, se vio en medio de toda una civilización … ahí reconoció algunos aparatos muy parecidos al que el había visitado.



                                       ( ... continuará ... )



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viernes, 26 de octubre de 2012

... IMÁGENES SUELTAS ... fasciculo III








 
   Las imágenes seguían pasando. Empezó a sentir fatiga. Cada vez más mareado … hasta que perdió el conocimiento.
  Cuando volvió en si estaba acostado sobre una mesa. Cerca de él, el extraño ser lo miraba expectante.
    --- Perdón! Usted ha sido escogido de entre centenas y centenas porque nos pareció estar preparado. Lo siento … pero su mente no tiene aún capacidad para tanta información.     Tendremos de esperar unas semanas más. Hoy nos quedamos por aquí. Volveremos a contactar contigo de aquí a dos de las vuestras semanas. 
 




 
    Le hizo una venia de cortesía al mismo tiempo que lo invitaba a volver al primero salón. Después de algunos segundos completamente solo se abrió otra puerta y pudo veer la escalera por donde entró.
     Ya en el suelo miró hacia arriba. Aquella gran cosa pareció vibrar. 
     El trípode se recogió lentamente pero el disco se mantenía inmóvil en el aire. Después, de repente, se elevó por el cielo nublado. Rápidamente desapareció.

  





   

De nuevo todo era silencio … todo era soledad.
Buscó su coche. Estaba en el mismo sitio donde lo había aparcado. Caminó hasta el. Todo funcionaba en perfectas condiciones.





 


      Velozmente condujo hasta casa de Sonia. Tenia que contarle … necesitaba desahogarse con ella. Miró su reloj … marcaba las nueve y media de la noche. Se dirigió a S.Joäo do Estoril. 
      El viaje duró poco. Aparcó a su puerta. Rodeó el edificio. En su planta no se veía ninguna luz. Habría salido?
Pero habían quedado para cenar en su casa … con sus padres …
      Hizo sonar el timbre. Insistió un poco. Después del tercero intento se encendió la luz de su habitación. Lentamente la ventana se abrió.



 



     --- Que quieres ¿???!!!
Que quieres?!!!! Como que quieres ¿!!!? Que querría decir con aquello ¿???!!!
      --- Llegué …
     --- Estarás de broma, seguramente.
   --- No comprendo … no habíamos quedado para cenar?
   --- A las dos de la madrugada?
     Se quedó mudo. Las dos horas de la madrugada? Volvió a mirar su reloj … seguía marcando las nueve y media … entonces comprendió … Su reloj se había parado … entonces … cuanto tiempo estuvo en el aparato? 







 
 
    Seguía mirando la silueta de Sonia entrecortada en la ventana … No conseguía articular una única palabra. A ella le pareció raro.
      --- Estas bien?
    No. No estaba bien. Su cabeza parecía querer estallar en cualquier momento.
     --- Sube. Voy abrir.
     Siguió allí hasta escuchar el click de la puerta de entrada del edificio. Como un autómata subió los tres escalones de la entrada y entro en el ascensor. Cuando este paró, dos plantas arriba Sonia estaba esperándole.
     --- Qué ha pasado?
     Solo después de entrar y sentarse en el sofá fue cuando miró de frente. Durante dos horas contó todo de lo que se acordaba. Intentó no olvidar ninguno detalle.
     Ella le escuchó en silencio pero atentamente, con una postura casi ausente.



 

 
-->
     --- Bueno! No pensarás que después de estar esperando mas de tres horas por ti, de haber llamado no se cuantas veces a tu móvil, a los hospitales, a la policía, temiendo que te hubiese pasado algo grave, no esperas que yo trague esa historia tan fantástica contada con un dramatismo excelente, verdad?
      Era la noche de quedar sin palabras. Tanto había esperado el momento de estar con Sonia y contarle todo aquello por que pasó … y ella … le contestaba con aquella mirada fría y acusadora.
      Se levantó y salió sin decir una palabra más.


                                   ( pufff ... continuará ... ) 



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viernes, 19 de octubre de 2012

... IMAGENES SUELTAS ... fasciculo II ...






 
     Algunos minutos después ya pudo distinguir en la distancia las luces de la carretera y de las casas. Y … en el medio del valle … acerca de trecientos metros de el, estaba aquello … algo parecido a dos platos de caldo invertidos el uno sobre el otro teniendo como base algo parecido a un trípode de camera fotográfica gigante.




 

        Suaves luces de un tono azulado se veían por la parte de abajo del aparato y por la parte de arriba tenia luces entre  rojo y  naranja.
     Demasiado fuerte para el. Había leído muchísimo sobre el tema pero estaba muy lejos de imaginar que un día iría ser testigo de algo así.
      Salió del coche y caminó con paso decidido en dirección de … aquello …
       El terreno era irregular.
      --- Ahora vendría bien un poco de aquella luz de hacia un rato --- habló consigo mismo  como  pensando en voz alta.
      Como si alguien lo hubiese escuchado un pequeño foco de luz salió del aparato en su dirección, permitiéndole ver perfectamente donde ponía sus pies. No tenia dudas. Alguien lo guiaba. Rápidamente llegó  junto al trípode.
      Así de cerca parecía mucho más grande … mínimo de tres metros de altura … el aparato tendría unos cinco o seis metros de diámetro.
      Se quedó allí parado un par de minutos … observando … El silencio de la noche lo cubrió totalmente y por  primera vez sintió frío.
    Le gustaría tener Sónia allí, con él. Le hubiera gustado compartir aquella experiencia única con ella. Si estuviese seguro de que aquello se mantendría  allí arriscaría ir a S.Joäo a por ella. Pero no se iba arriesgar. Además … tampoco estaba seguro que Sonia quisiese acompañarlo.


  
 

    De repente, el silencio de la noche fue fuertemente interrumpido por un sonido seco.
Una escalera bajó lentamente parando cerca del suelo. Una puerta se abrió. La luz que venía de dentro no permitía ver nada de su interior. Envueltos en aquella luz intensa aparecierón dos siluetas. Y de nuevo volvió aquella voz …
       --- Tranquilo. Somos gente de paz. Sabemos que tú también lo eres.
     Uno de ellos le hizo un gesto inequívoco invitándole a que subiese.
       Dudó. Reflexionó un poco pero terminó subiendo.
Como le gustaría que Sonia estuviese allí. Con que ganas subiría aquella escalera tomándola de la mano.
    Antes de entrar completamente miró su entorno. La oscuridad era casi completa. La carretera estaba desierta.
      Entró. 



 
 

       Fue como penetrar en un sueño lleno de luz. Todo dentro estaba iluminado, todo lleno de luces indirectas. Un enorme salón estaba delante de el … no había nada … absolutamente nada … ni una silla … ni una mesa … nada de nada.
       Sintió cerrarse la puerta. Pero en la pared no quedaron  vestigios de haber existido allí una puerta.
         De las siluetas que veía desde fuera … ni señal …
        --- Tranquilo … relaja …
       Siempre la misma voz en un idioma perfecto y sin acento.
     Pasó bastante tiempo sin que nada pasase … empezaba a estar incómodo. Escuchó otro sonido seco.
       A su lado, abriéndose como si fuese de la nada, otra puerta.
      De nuevo … nadie …
      --- Entra.
    La puerta era alta pero estrecha. tubo que pasar de perfil.
    Le esperaba un panorama un poco distinto. Las paredes estaban llenas de paneles con muchas luces. Parecían adornos de navidad. En el centro de este salón, un poco mas grande que el primero, una mesa y tres sillas … todos en el mismo color crema. En uno de los lados estaba una enorme pantalla.  Continuó mirando en si alrededor. Entonces, los vio.
      --- Hola! Bienvenido!



 
 


     Estaba completamente sorprendido. Los veía en contra luz, pero los contornos tenían la figura humana. La cabeza, tal vez, un poco mas redonda … los brazos, posiblemente, un poco mas largos … pero muy semejantes.
Intentó hablar … pero la voz no le salió por la boca abierta … quisiera decirles … “Hola! Es un placer!” … pero no le salió ningún sonido.
    --- No te esfuerces en hablar. Limítate a pensar. Nosotros comprendemos. Nosotros leemos tu pensamiento.
    Todo aquello seguía pareciéndole  irreal. Uno de ellos se acercó y le dirigió una mano con un guante.
    --- Observamos este planeta desde hace mucho tiempo. Sabemos que este es el ritual que tenéis como tipo de saludo.
      La mano era de tacto muy suave.
    --- Ven! Tenemos muchas cosas que decirte, pero es necesario estar preparado.
     Le indicaran que se sentase. Entonces entraran todos.
   Estaban vestidos con algo parecido a un chándal de color también crema, con un símbolo indescifrable, para el, en el pecho. La vestimenta les cubría la cabeza … y tenían aquellos ojos grandes …
     Uno de ellos se sentó junto a él y colocó su mano abierta sobre la mesa. Inmediatamente se iluminó la gran pantalla.
     Empezaron a pasar imágenes a una velocidad enorme. apenas se daba cuenta de lo que veía.
    --- Tranquilo. Todo lo que pasa ahí quedará en tu cabeza. Un día comprenderás.



                              ( uyyy ... continuará ... ) 



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martes, 16 de octubre de 2012

... IMAGENES SUELTAS ... fasciculo I



 
      Aquí os dejo otra historia escrita por mi hace unos años.
     Cuando escribo prosa siempre intento dejar el mensaje de aquello en que creo … y este tema es, para mi, muy especial.





  



IMÁGENES SUELTAS


De jorge peres



 


       Las piernas le temblaban un montón. Todo su cuerpo era un temblor como si lo hubiese alcanzado una descarga eléctrica.
      Muy sinceramente, todo aquel día empezó con mal pie.   Por la mañana se despertó mucho más pronto de lo que pretendía. 
      La noche fue larga  ... se durmió sin esperanza ya de poder hacerlo. Y el motivo de su insomnio no era la diversión … ojalá lo fuera.
      Fue cenar con Sonia, su novia desde hace algunos meses, pero las cosas no estaban muy bien entre ellos. 
      La cena que el esperaba de paz se tornó un combate verbal de los mas duros trabados entre ellos en los últimos tiempos.
     El tono de voz subió y lo acompañó la falta de respeto
    Un poco antes de empezar el postre tomó la resolución de irse. Las cosas estaban yendo demasiado lejos y podrían terminar peor.



 

       Decidió caminar un poco junto al mar. Antes, condujo por la carretera marginal a poca velocidad. Se sorprendía de eso. 
    Normalmente cuando estaba nervioso disparaba por la carretera a toda la velocidad, haciendo tronar en el aire el potente sonido del motor de su coche.


      
 


      La verdad es que aquella última discusión no lo alteró como en otras anteriores.
        Cuando salió de casa de Sonia estaba sereno, solo sentía que necesitaba estar solo en un sitio tranquilo … Era lo que buscaba ahora mismo.
     Cruzó Cascais, siguió hasta el Guincho. Aparcó en el  lado izquierdo en dirección subida.
      Delante suya, el grande … el solitario Océano Atlántico, rolaba  sus olas contra una arena desierta, tan solitaria como él.






 
        Pensaba a lo que había llegado su vida! … Treinta años, divorciado, un empleo que se podría considerar estable, una casa pequeña, pero suficiente para el, un buen coche … …
           Conoció Sonia hace menos de un año. 
          Mas joven que el, una mujer muy presentable, de aquellas de causar envidia, a veces demasiada, en cualquier sitio público. En el inicio de la relación las cosas han funcionaran de forma casi completa … las diferentes se manifestaran un poco más tarde … pero eso siempre pasa en una relación.
      La verdad es que no pudo o supo superar esas divergencias que en el principio parecían inofensivas.
         Sinceramente empezaba  a sentirse cansado de una relación en que las cosas solo funcionaban en la posición horizontal de una cama, fuese la suya o la de ella. 

 

       Pero, lo que pasó hace dos semanas vendría a revelarse importante, no solo en su vida sino, también,  en aquella unión,  un poco tambaleante.
     Fueron esos recuerdos que lo mantuvieron cerca de dos horas, delante de la playa y lo llevaron mas tarde a su casa sin la más leve sensación de sueño.
       Han sido esos hechos que los que provocaron los temblores que ahora sentía en su cuerpo.



 


     Todo empezó aquel día en que trabajara en el turno de  tarde, saliendo del curro a las nueve  de la noche.
    Lisboa se preparaba para recibir la Navidad con los brazos abiertos, con algunas avenidas ya iluminadas y otras en preparación.




 
 
     Aquella hora aún había gente intentando llegar a casa a tiempo de ver uno de los muchos culebrones televisivos y el tráfico empezaba, lentamente, a volver a la normalidad, después de una hora  punta verdaderamente loca.
      Rumbo a Cascais, evitaba siempre la autopista, prefiriendo la carretera marginal.   
     Todos los días hacia aquel camino. La conducción del coche se tornó, mecánica y automática.




Circulaba cerca de Oeiras cuando algo llamó su atención. Una luz muy clara y fuerte parecía venir de una zona exterior de la parte urbana.
Redujo la velocidad.
Pasados algunos segundos volvió a ver aquella claridad. 




 


      Puso el intermitente de la derecha y salió de la carretera principal.
       Los demás conductores ni se dieron cuenta.
     Sentía una necesidad imperiosa de descubrir el origen de aquella luz.
    Cruzó toda la ciudad de Oeiras y sin querer entró en la carretera de lo llevaría a Cacén.
       Ya no se veía ninguna luz.
     Miró en todas las direcciones … en el horizonte solo las luces de la carretera y de una o otra casa.
     Habría sido imaginación suya? La verdad es que fuera un día largo y movido.
   Se preparaba para cambiar el sentido de la marcha cuando, de repente, dejó de ver. 


 


    Fue algo muy raro … fue intenso … inmenso … casi indescriptible … Fue como si, de repente, todos los focos del estadio de fútbol de Benfica se encendiesen al mismo tiempo por sobre su cabeza … Se quedó parado … deslumbrado … intentando comprender …
      Solo algunos segundos después se dio cuenta que el motor de su coche se había parado y sus luces apagado. El radio también estaba silencioso.


 
 


     No sentía miedo, solo un pequeño des confort por no poder ver nada en su entorno … después aquella voz dulce, tierna que le repetía muy bajito … :
      --- Tranquilo … no te pasará nada malo … ya te daremos todas las explicaciones … tranquilo …
       Pero no conseguía ver a nadie en su alrededor. Dentro de su coche tampoco se escuchaba ningún  sonido, y, lógicamente, no había nadie. Lo raro es que la voz parecía estar muy dentro de su cabeza.
     Todo pareció estar suspendido en el aire durante mucho tiempo.    Después, tan de golpe como había aparecido la fuerte luz se apagó. 
     Todo volvió a la oscuridad.



                                   ( continuará )


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